Descubre más sobre los neobancos, entidades sin sucursal y tasas de interés
El mundo digital ofrece soluciones que llegan a más personas. Dentro de este mundo fintech se encuentra la banca digital, mejor conocida como neobancos.
Estos bancos iniciaron como apps que prestaban servicios financieros, y actualmente son una competencia directa de la banca tradicional, con una particularidad muy importante: no tienen sucursales físicas.
Los pronósticos indican que los bancos sin oficinas llegaron para quedarse. De hecho, solo en Estados Unidos, alcanzarán a mover 820.000 millones de dólares, según Statista Digital Market Outlook.
Con respecto al continente latinoamericano, el neobanking va por buen camino. Son cinco los bancos, oriundos de la región, que ya han logrado convertirse en exponentes de los servicios bancarios en línea.
A partir del último año la mayoría de estos ya actúan con licencias bancarias de entidades financieras nacionales, licencias de Visa y Mastercard.
Muchos se ven atraídos por las ofertas y costos de los challenger banks, entre ellas, el no cobro de manejo o de seguro obligatorio.
Así pues, algunos colombianos utilizan, incluso por primera vez, cuentas de ahorro y corrientes, tarjetas débito y crédito como en el caso de las tres nuevas tarjetas en el mercado, estas son la de Rappypai, Nu y Sempli.
Algunas aclaraciones
Cabe resaltar que los bancos digitales se diferencian de otras plataformas o aplicativos digitales porque, a diferencia de los otros, prestan servicios tanto financieros como bancarios.
En la categoría de los neobancos, hay bancos con licencia que se denominan challenge banks. Son llamados así porque compiten al mismo nivel que la banca tradicional.
Es decir, una startup, empresas cuyo modelo de negocio es comercialización por medio de las nuevas tecnologías, puede estar dentro del sector fintech. Asimismo, el sector fintech provee servicios financieros utilizando tecnología.
¿Cómo funciona?
Al cumplir con este aval, los neobancos se convierten en challenger banks. Esto significa que no todos estos nativos digitales cuentan con una licencia, o al principio operan sin una.
Este fenómeno es reciente en el país, pero parece prometedor. La Superintendencia Financiera ya ha autorizado la operación de Lulo Bank, Nu bank, Sempli e Iris.
Un dato relevante es que Nu, el banco mirado, esta abriéndose camino para cotizar en Wall Street.
El paisaje de los neobancos es joven y volátil, sin embargo, su éxito hará que probablemente sea más común usar sus servicios o se convierta en el statu quo.
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